Los miradores del Tajo
Si llegas por el acantilado o por el pinar, qué importa. Seguro que harás los dos caminos, o en días diferentes o combinando ambos.
Y quieras llegar o no a Los Caños, pasarás por aquí y te detendrás.
Mirarás la Torre del Tajo. Y si atiendes a las visitas organizadas del Punto de Información, la conocerás.
Y te recrearás en las vistas de ambos miradores. Si llevas algo de comer, es el momento, así te detienes un poco más.
¿Te atreverás a contemplar la caída del sol? Lleva luces. Y si quieres contemplar el paraje con luna llena, presta atención a la convocatoria de la Moon Trail de cada verano. Es la forma más festiva y segura de recorrer la Breña por la noche. Y entonces también podrás visitar la Torre.
La Torre Vigía Torre del Tajo es del siglo XVI y está catalogada como BIC.
Desde el mirador, se puede divisar Barbate, la Atunara y la ensenada de Barbate, que muere en el cabo de Gracia. Coronándola y detrás, la Sierra del Retín, Zahara de los Atunes, Sierra Plata y San Bartolomé y Punta Camarinal.
En los días más soleados se contempla Tarifa e incluso el inicio de la costa de África.
Desde el mirador del acantilado, oteamos la línea de costa con pueblos como Barbate o Zahara de los Atunes y enfrente África, emergiendo en la otra orilla del estrecho.
La pared del acantilado, de más de 100 metros de desnivel en su punto más alto, es constantemente moldeada por la mar y el viento de levante, los que han creado numerosos abrigos y oquedades y la han convertido en una inmensa pajarera sobre la mar.
Los brotes de agua, los caños o chorros que emergen del acantilado, son otro agente que contribuye a la creación de pequeños refugios y de caprichosas formas. Casi escondidos, los nidos se construyen en pequeñas plataformas fijadas la vegetación.
Gaviotas patiamarillas, argénteas, palomas, grajillas y otros pájaros pequeños son sus habitantes.
No tengas prisa. Si el pinar barbateño es un milagro sobre las dunas de arena que ahora contienen, qué decir de los miradores en su propio corazón. Desde el centro del Parque Natural de La Breña y Marismas del Barbate contemplarás las mejores vistas de la costa barbateña hasta Zahara de los Atunes y Tarifa, del norte de África y de las aves que hacen sus nidos en el propio acantilado.