Camping, hoteles, Los Caños y… Zahara
Terminada la temporada de verano, es tiempo de análisis y de recapitular sobre cómo le ha ido a nuestro pueblo, que aspira (con bastantes merecimientos, diría yo) a tener cada día un sector turístico más "potente" que ayude a sostener y equilibrar una economía que, desde que dejamos de ser aquella "potencia" pesquera y conservera, anda dando "bandazos", intentando que cuadren las cuentas para que nuestro PIB sea capaz de sostener de manera digna a este pueblo tan maravilloso que nos vio nacer.
Y es curioso cómo al observar los distintos datos que nos llegan, se vuelven a ver los "contrastes y contradicciones" de nuestro querido pueblo. Y así, leemos y escuchamos que por ejemplo hemos tenido "tropecientas mil" pernoctaciones en hoteles y camping, y algunos dicen: “puñetas, pero si en Barbate no tenemos camping, y hoteles muy poquitos”. Y entonces sale el "interesado" de turno a decirnos que esos camping y muchos de esos hoteles están en Caños de Meca y Zahara, que son Barbate. Y claro, por muy torpes que seamos, hasta ahí llegamos, ya que efectivamente Caños de Meca y una parte de Zahara sabemos que pertenecen a Barbate, pero no de ahora, sino desde marzo de 1938. Por cierto, el día que Zahara de los Atunes plantee ser independiente (que me imagino que algún día lo hará, como nosotros lo hicimos de Vejer en 1938), qué dilema, ya que una gran parte de su desarrollo hotelero y residencial está en el término municipal de Tarifa, que, hasta ahora, ha puesto la mano para el cobro de tasas e impuestos y poco más. Pero bueno, quien soy yo para meterme en esos líos.
Pero como decía, y por no salirme del guion, creo que a los barbateños (y a lo mejor alguien puede decir que pecamos de cierto "chauvinismo") nos gustaría tener algunas de estas instalaciones turísticas "más a mano", por ejemplo un camping por la zona del ferial, o del Jarillo, o un gran hotel en la zona de la Chanca, o del Puerto Deportivo.
Otro de los grandes déficits que se deberían ir intentando corregir es tener unas instalaciones sociales, deportivas y culturales a la medida del siglo XXI, ya que las que tenemos son casi todas del pasado siglo, y para colmo están en malas condiciones. Y por supuesto unas calles y aceras acordes también con el siglo que vivimos.
En fin, que acabada la temporada de verano, AJOLÁ se aproveche el tiempo que queda hasta el próximo verano para ir corrigiendo deficiencias tan palpables como evidentes. Y estas cosas, como siempre digo, si se hacen entre todos (por aquello de que la "unión hace la fuerza") pues mejor que mejor. Y lo último, de verdad, es que AJOLÁ a esos cientos de personas que en estos meses han trabajado en la hostelería se les hayan respetado sus derechos laborales y económicos, en la misma medida que le exigen el cumplimiento de sus obligaciones. Y para terminar, ahora sí, no vendría mal una "pensadita ", también, al asunto de los pisos turísticos. Salud.