Gracias a los voluntarios, pero así no
En el día de ayer, el Ayuntamiento de Barbate realizó un merecido reconocimiento a los jóvenes Patricia López y Javier Calderón por su limpieza de la Playa del Carmen, pero sorprenden las ganas de algunos concejales y del alcalde de salir en la foto cuando también es el reconocimiento de su mala gestión, pues el impulso de este jóvenes es por el mal estado de las playas que nuestro equipo de gobierno no supo disponer para abrir a tiempo.
Inicialmente, el Ayuntamiento anunció la apertura de las playas para el sábado 15 de junio. Y llegó el día y las pasarelas no estaban colocadas y no se había cerrado la contratación del personal de playas necesario. De hecho, a principios de la semana siguiente se vio a Juan Miguel Muñoz (Concejal Delegado de Playas y a la derecha en la foto) y a Mario Caballero (Concejal Delegado de Aguas) , en un arrebato de voluntarismo, trabajar en la Playa del Carmen colocando las pasarelas. Dos trabajos mal hechos, el del incumplimiento de sus responsabilidades para que las playas abrieran a tiempo y el del abandono de sus obligaciones de aquel día.
Ahora hemos conocido, a través del comunicado del Ayuntamiento de Barbate, que estos dos jóvenes, Patricia López y Javier Calderón, tomaron la iniciativa y se pusieron por su cuenta a limpiar la Playa del Carmen. El edil de Playas, Juan Miguel Muñoz, ha agradecido a Javier y Patricia su labor que “al hacerse visible en redes sociales gracias a la grabación improvisada de un vecino, se ha convertido en ejemplo a seguir por muchos jóvenes”, dice. El alcalde, Miguel Molina (en el centro en la foto), ha añadido: “somos conocedores de que en nuestro municipio se producen a diario iniciativas como estas, que surgen de niños, jóvenes y adultos, que de forma anónima y mostrando un gran amor por su pueblo y por su entorno protagonizan gestos similares”.
En efecto, son muchas las campañas de limpieza que promueven colectivos y las que emprenden individualmente los barbateños, aunque sea el mínimo gesto de recoger unas colillas o una botella en la playa, pero estas acciones voluntarias y voluntariosas no ocultan, sino que ponen de relieve, la mala gestión municipal.
Y así seguiremos, porque nuestros dirigentes se complacen en las fotos con los héroes locales y el pueblo, la ciudadanía, los barbateños y barbateñas, parece contentarse con estas fotografías y no molestarse con lo que demuestran.
