Concentración ilegal

Como viene haciendo desde meses atrás, el Pacto Social por Barbate ha vuelto a convocar una concentración junto a la puerta del Ayuntamiento de Barbate el día 3 de abril a las 19 horas, justo antes de la celebración del Pleno Ordinario. Esta concentración cuenta con todas las autorizaciones por parte de la autoridad gubernativa.

Sabido es que estas manifestaciones ciudadanas que reclaman a los regidores municipales unos servicios públicos dignos han molestado al alcalde Miguel Molina. En la primera de ellas, como recogimos aquí, quiso tomar la palabra para silenciar la de los convocantes, cosa que no se le permitió, pues precisamente es su falta de voluntad de sentarse a una mesa o siquiera responder a los escritos que se le dirigen por registro uno de los temas de mayor preocupación.

La insistencia de los convocantes, Miguel Molina la respondía siempre con silencio. Un silencio incómodo, como se intuía y ahora se sabe, porque hoy mismo el Ayuntamiento de Barbate la lanzado la convocatoria de una parada en el mismo sitio y a la misma ahora que la que no quiere escuchar ni atender.

Conociendo que las autoridades han dado su plácet a la movilización del Pacto Social por Barbate, no podemos más que dudar de que también lo haya dado a la promovida por Miguel Molina o en quien haya delegado, o incluso de que haya informado como corresponde.

¿Qué buscan los de Molina, enfrentar a los barbateños? ¿Es esta su forma de gobernar?

Las calles no son del alcalde sino de todos los barbateños. Lo que es responsabilidad de nuestro alcalde es que nuestras calles estén en condiciones, con vías libres de baches y socavones (como el que acaba de aparecer frente al Cine Avenida) y con aceras transitables. Recorrer las calles libremente es cosa de todos y utilizarlas para hacer manifestaciones y concentraciones es cosa que debe informarse a una autoridad superior a la alcaldía, como en efecto ha vuelto a hacer el Pacto Social por Barbate.

Si el objetivo del alcalde es silenciar a los vecinos descontentos de su gestión, quejosos y molestos, mal vamos, y si su objetivo es sacar a los suyos para enfrentarlos aún peor.

No va a callar usted a los movimientos sociales. Si en esta ocasión no se los escucha, insistirán. Si se empeña usted en apartarlos de la puerta del ayuntamiento en los días de pleno, ellos desistirán, que son razonables y no buscan enfrentamiento, pero acudirán otro día cualquiera a cualquier otra hora, dando los pasos que demanda la ley, con más argumentos y más cargados de razón.

¿Y este miércoles? Afortunadamente los vecinos y vecinas de Barbate saben estar cada uno en su sitio y habrá lugar para todos si no acude la Guardia Civil a desalojar a los convocados por Molina. Si esta vergüenza llegara a acontecer, tendría un único responsable, nuestro alcalde-presidente.

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