Nuestro pueblo, pese a su “juventud” como municipio independiente, tiene su historia; y pese a esa juventud, también tiene sus contradicciones. Y la verdad es que contemplando unas fotos que se publicaban en una página que se llama “El tío de los Aullíos” (nombre barbateño donde los haya) veía esas fotos que hizo Albert Ripoll Guspi (por los apellidos debe ser catalán) en una visita a Barbate en 1962, es decir en términos históricos “hace dos días”.

Y como digo, esas fotos “retrataban” nunca mejor dicho, las contradicciones, o algunas de las contradicciones de nuestro pueblo, donde no sé si muchas o pocas veces, en este corto periodo de tiempo que va de 1938 a hoy, hemos vivido inmersos en ellas.

Por ejemplo, en 1962, año de la foto, éramos ya una “potencia” en temas pesqueros y conserveros, estando posiblemente entre las primeras ciudades de España en esos dos apartados, y sin embargo, cuánta miseria, cuántas carencias se aprecian en esas fotos. Y para los de mi generación no es algo que nos tienen que contar, porque fue algo que vivimos en "vivo y en directo”, ya que fueron los años de nuestra niñez.

Y es que en los años 40-50 (años duros de postguerra) nuestro pueblo, al reclamo del boquerón, los atunes y las fábricas de conservas, crecía al “aluvión”, y como en todos esos crecimientos, se daban esos contrastes y contradicciones. Se daban las “partijas” del vino peleón, y se daban también las de fino la Ina. Y en ese “maremágnum”, como pasa siempre, y no solo en Barbate, unos se “forraban” y otros tenían para poco más que “ir tirando”. Fijaros cómo será la cosa, que todavía ese “Zapal” tan identificativo del Barbate de aquella época sigue siendo un inmenso solar prácticamente vacío. Por cierto, qué triste comprobar como hoy, 50 años después de su derribo, subyace en el recuerdo de algunas personas modestas, algunos “usos y abusos” tan propios de la época, en la que se hizo el desalojo de sus viviendas.

Y es que, cambiando de tema… o no, aunque en Barbate por razones obvias no conocimos a los “terratenientes” al uso, en aquella época, años 50-60 del pasado siglo, los terrenos de nuestro pueblo se lo repartieron entre 2 ó 3, más las “migajas” que recogieron algunos, dándose la curiosa circunstancia, que incluso hoy en 2024, cualquiera que vaya a comprar un “terrenito” comprobará que posiblemente el dueño, o los dueños son gente de aquella época de crecimiento y expansión de nuestro pueblo. Hay por ahí un artículo de la Ley Hipotecaria, creo que el 203 o el 205, que posiblemente en aquella época, en Barbate fue de los pueblos de España donde más se usaron, y mediante los cuales, unos pocos esquilmaron una parte muy importantes de los terrenos de nuestro pueblo.

En fin, que al final el escrito se ha convertido por mor de unas fotos, en una “recopilación” de vivencias y recuerdos de este pueblo nuestro, en el que a día de hoy seguimos con nuestras contradicciones, seguimos con nuestros “retrasos históricos”, con la incertidumbre añadida de que ahora para añadir más contradicciones, no sabemos si somos más de “carne o pescao”, y nos debatimos; o, mejor, muchos se debaten entre ser una "potencia turística", aunque solo sea imaginaria, o como decía el título de aquella película "volver a empezar", con el tema pesquero, centrado sobre todo en la importante recuperación de las almadrabas, en un paraíso industrial o pesquero. Y si no ya se le ocurrirá a cualquier "iluminado" alguna ocurrencia, para convertirnos en "paraíso", aunque como decía aquel mago, solo sea "producto de la imaginación". Sea como fuere, salud, en este "paraíso", ya sea real o inventado, en el que como cantaba Serrat, para acallar críticas, el “poder establecido” intenta mantenernos en una permanente FIESTA, en las que como decía la canción hasta “el noble y el villano, se dan la mano”. Salud.